AFRICA, TANZANIA, SERENGETI, Experiencia Una noche en el Serengeti

La noche pasó deprisa por el cansancio acumulado y el buen colchón de la cama, enseguida llegaron las luces del amanecer con el cántico de los pájaros.



























Después de una refescante ducha , llamé a la recepción para que viniera a buscarme mi Masai, y
con el me fuí a desayunar oyendo a los hipos del
lago, un auténtico lujo...




Repartimos regalos que había traído ( 50 pares de gafas de  sol) entre los trabajadores que arrancaron sonrisas impagables y nos hicieron disfrutar de un divertido momento .





Recogimos las cosas y salimos de Safari, nada más empezar las colas de La Migración , se hacia notar con manadas de Ñus y  algunas Cebras , que llenaban de polvo el camino y el horizonte con su interminable hilera .


El recorrido por la llanura del Serengeti, era como estar en medio de un documental de la 2.El paisaje había cambiado de forma drástica con respecto al valle frondoso del Cráter y de sus alrredores, ahora la silueta de los animales se veía a lo lejos, incluso los que estaban descansando o dormitando.Lo que les hace estar relativamente más tranquilos en esta época de bajas lluvias con poca hierba.

 Foto  de Mar.

Las escenas se sucedían a nuestro paso,  Babuinos de traslado



 o  de tareas domésticas.



 Alguna hiena buscando restos,



 Buitres dando cuenta de los restos de la carroña..




 Búfalos en su momento del baño:










Pero  sobre todo leones



 Cachorros bien alimentados

Y las madres descansado






En el paisaje se destacan como islas en el mar, los conjuntos de rocas graníticas con árboles a su alrededor , que son el refugio de los leones.


El lugar perfecto para sacar adelante sus crías y contemplar sus dominios al atardecer.





Nuestro conductor, nos acercaba a las zonas donde se podían apreciar y casi "tocar".Personalmente tuve mi momento de pánico con uno de los 3 leones jóvenes que tuvimos a mano.
Su mirada y su comportamiento, me hizo pensar que no estaba nada cómodo con nuestra presencia y que le estábamos incomodando notablemente, especialmente cuando se añadió un nuevo vehículo que  se aproximó demasiado.Su imprevisto gesto , me llevó al fondo del vehículo desde la primera fila, sin querer participar más del momento, de la escena, incluso deseando que acabara pronto....Sinceramente creí que nos atacaba




Tuvimos suerte de que pudiéramos acercarnos lo suficiente como para disfrutar de un Leopardo durmiendo en el árbol, al que despertamos con nuestro murmullo....







Para relajarnos, nada mejor que tomar un pic-nic en un alto, con mesas y baños, todo un lujobien organizado, pero siempre con la naturaleza salvaje cerca..



La sorpresa del día fué una escena de caza de una manada de leonas y leones jóvenes que acababan de matar un Ñu.



 Cuando llegamos, aun le quedaba un suspiro de aire y contemplamos durante más de media hora todo el ritual entre ellas a partir de este momento.





Los conductores se felicitaban por esta suerte que no habían contemplado en sus más de 10 años de experiencia,








Después de esta experiencia, nos desplazamos hasta el Lodge móvil donde pasaríamos la noche.
pero antes de llegar, nos tenían preparada una sorpresa:






Un gin tonic, contemplando el atardecer con todo el detalle en pleno campo....
Brindamos por todos los que no estábais y lo disfrutamos de verdad.



Llegamos al campamento, donde las tiendas eran individualesy super completas.


por dentro,no faltaba ningún detalle, super limpia, amplia, mesas, mesillas, armarios, lavabos, perchero..




Tenían su  baño completo, separado de  una ducha privada, solo tenías que avisar de la hora a la que querías ducharte y te traían el agua caliente.


Luego cerca teníamos otras 2 tiendas comunes, una de ellas , era el salón y la otra el restaurante.



 Después de cenar, estuvimos frente al fuego, charlando y comentando las anécdotas del dia, hasta que el cansancio nos indicó que era el momento de retirarse y descansar...

Fuimos acompañados hasta las tiendas por el personal, donde se nos indicó que no saliéramos por nada del mundo y si teníamos un problema  o algún animal dentro de la tienda,  "que hiciéramos sonar el Pito... "...

Francamente se hizo larga la noche y difícil, los ruidos disparaban la imaginación de todos...como para levantarte a buscar el Pito...  Lo mejor cerrar los ojos, ponerse los tapones y rezar...










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