CENTRO AMERICA, PANAMA , BOCAS DEL TORO 2010

  

En la costa noreste , en pleno Mar Caribe, Panama esconde un arhipiélago de pequeñas islas la mayoría deshabitadas .

Paraiso de Piratas, esconden Playas ideales para el Surfista, arrecifes de coral con navios españoles hundidos, Playas de acceso restrigido con mucha y variada vegetación y fauna curiosa como su famosa rana roja.

La Isla de Colón dispone de un pequeño aeropuerto, en pleno centro del pueblo, que finaliza en el campo de futbol y donde es fácil encontrarse con perros y niños en bicicleta cruzando por la pista.

































Todo en general en el aeropuerto, en los vuelos, es muy de andar por casa, seguridad, control, limpieza , pero quizás ese es el encanto.

Un retraso te permite irte a tomar un cafe al pueblo o ver el partido de futbol del equipo local en el final de la pista.

En las pocas calles del pueblo, hay mucha animación, gente en bicicletas "guapas " tipo californiano.

Los puestos de artesania y recuerdos, la mayoria son de argentinos y chilenos que se pagan así su estancia y las copas de la noche.






























También hay pequeñas tiendas de pinturas en telas y cuadros que aunque muchas son de Haitianos que puedes haber visto en Santo Domingo.La vida social es intensa en la calle aunque sea en la penumbra.
Hay restaurantes, algunos con españoles en la cocina o de propietarios.
Pequeños hoteles con precios módicos y casi todos tienen su terraza-embarcadero al que se puede llegar en barcos-taxis, con los que te mueves de una isla a otra, de un bar a otro.
Los taxis, Pick up para colocar tu tabla atrás, cobran un precio por plaza ocupada y se suele compartir, incluso ellos en el trayecto, paran a coger a alguien sin consultártelo ( algún amigo o simplemente un vecino ).



Una de las playas más famosas es Red frog beach, el acceso es previo pago, está muy cuidado y es como un parque nacional, la playa no defrauda, amplia con olas y puro estado salvaje.








































Los niños del lugar estarán encantados de buscarte la famosa ranita a cambio de una pequeña propina por ello.























Tienes también la posibilidad de acercarte a las manadas de delfines que vienen a alimentarse a una bahía con una alta concentración de pequeñas medusas.

Lástima que son bastante peligrosas y no puedes bañarte con ellos.  Solo el paseo en barca por los manglares ya merece la pena.



















Como alojamientos a destacar tienes el Hotel Playa Tortuga, que es una delicia, cerca del pueblo y con un trato espectacular. Tienen un cenador al más puro estilo de Polinesia, aunque la comida es regular.  La piscina como ves en la foto es fantástica.























Y como no, el hotel Punta de Caracol, la idea loca de un joven emprendedor español, que hizo hace 4 años lo que otros seguiremos soñando. 8 cabañas sobre el agua, con muchas comodidades y con muchas ganas de agradar.

No es barato, pero si puedes pégate el lujo y pasa un par de noches con ellos, seguro que repetirás.


























Por último deja que te confunda la noche y busca el Barco Hundido o el Toro Loco, seguro que harás amigos y terminaras pegándote un chapuzón.